Terremoto Ecuador

Solidaridad con Ecuador

Sabemos que desde ayer el corazón de un querido compañero de la Schola se encuentra consternado, y por la amistad y el cariño que a él nos une, también nuestro corazón está consternado.
Hablo Juan Ignacio Vara, que dejó la mitad de su corazón en Guayaquil (Ecuador) tras muchas décadas de amor y dedicación a esa tierra y a sus gentes.

Por él, la Schola Cantorum tuvo la oportunidad de conocer aquella hermosa tierra y a aquella hermosa gente que hoy sufre no sólo por la fuerza incontrolable de la naturaleza, sino también por el egoísmo incontrolable del propio ser humano.

Ayer ofrecimos un concierto itinerante por el Barrio de Zuazo-Arteagabeitia, y además de sentir al falta de Vara, comentamos y sentimos también cada una de las tremendas noticias que de aquella tierra amiga nos llegaban.

Si la música dicen que puede curar las heridas del alma, queremos que cada una de nuestras canciones de ayer, cantadas desde nuestro corazón consternado, pueda aliviar un poco las heridas del alma de nuestros amigos de Ecuador en estos duros momentos, y que alivie también un poco ese corazón consternado de nuestro amigo Vara.

El próximo día 30, cantaremos otra vez, en esta ocasión en la Parroquia de Santa Teresa con motivo de la celebración del 111 aniversario de nuestros amigos del Orfeón Barakaldés, y si estos amigos nos lo permiten, nosotros quisiéramos ofrecer y dedicar todas y cada una de nuestras canciones para aliviar las heridas del alma de las gentes de aquellas tierras, y espero que Juan Ignacio puede estar con nosotros para hacer aún más fuerte nuestro sentimiento.

“Tú eres perla que surgiste
del más grande e ignoto mar,
y si al son de su arrullar
en jardín te convertiste;
soberana en sus empeños
nuestro Dios formo un pensil
con tus bellas Guayaquil;
Guayaquil de mis ensueños.”

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